Últimamente me he encontrado con muchas disputas, respecto a la moción planteada en el título de esta columna, y lo ejemplifico con algunas frases de las cuales se me hizo mención reiteradamente: “las feministas no pueden bailar reggaetón”, “eso es una hipocresía”, “y así exigen respeto”, etc.
Más allá de intentar razonar con individuos que buscaban únicamente desacreditar un movimiento, este ejercicio me sirvió para analizar a profundidad la raíz de este rechazo: el género latino y el respeto hacia la mujer, siendo así pude percatarme de un patrón bastante común en un sector que compartía características e ideas y que comulgaban con la idea de que una mujer bailando sensualmente una canción explícita respecto a una relación sexual era denigrante para ella. Sin embargo ¿realmente es así?
Primeramente, me encuentro en la necesidad de aclarar y recalcar que sí, el reggaetón es misógino, pero es tan misógino como todo el resto de los géneros musicales. Ya que nos encontramos siendo parte de una estructura social cimentada en creencias machistas, por lo que gran parte de lo que derive de la misma, contará con estos tintes, ¿a qué me refiero? Lamentablemente no nos encontramos depurados de una cultura que está acostumbrada a representar a las mujeres como objetos sexuales, como musas inalcanzables, como seres que no tienen otra aspiración más allá de encontrar el amor, como mil y una interpretaciones que simple y sencillamente no nos pueden significar como seres humanos: tan débiles, fuertes, volubles, falibles, poderosos y sexuales como los varones.
Es en este ultimo concepto es donde encontramos un repudio que confunde el respeto con la negación: ¿Por qué una mujer que disfruta de su sexualidad no se valora? La respuesta a esta cuestión es que: la vida sexual de una mujer y cualquier persona no determina en ningún momento su valor. La sexualidad es un factor vital e importante en la vida de las personas para su pleno desarrollo; y el expresarlo a través de una canción no es en ningún momento y de ninguna manera, un acto de desprestigio para sí mismo, situación que suele ser muy recurrente en este género musical, ahora, existe una noción primordial para definir la línea que separa la expresión de la sexualidad de la cosificación femenina, la cual es: EL CONSENTIMIENTO.
El consentimiento es un concepto tan deformado y malinterpretado a lo largo de la historia que lamentablemente a estas alturas, es necesario recalcar su importancia. Por ello, es que en distintas expresiones que se engloban dentro del espectro del arte y la cultura existen muchas acciones denigrantes hacia la mujer sin ser siquiera conscientes de ello, y lo podemos encontrar en canciones que se consideran románticas y delicadas, por dar un ejemplo:
“Te quedas callada sin ningún reproche, por eso te quiero, por eso te adoro, eres en mi vida todo mi tesoro”- José José
“Corre por tu vida, pequeña niña, si te atrapo con otro hombre será el fin” / “Prefiero verte muerta que con otro hombre” – The Beatles
“Solía amarla, pero tuve que matarla, tuve que enterrarla seis pies bajo tierra y aún puedo oír cómo se queja” – Guns n’ Roses
“Te vas porque yo quiero que te vayas. A la hora que yo quiera te detengo. Yo sé que mi cariño te hace falta. Porque quieras o no, yo soy tu dueño” – Luis Miguel
Interpretaciones que toda la vida hemos entendido como algo romántico, suelen estar envueltas en un pensamiento que no da espacio a la libertad y autonomía del genero femenino, al entender la idea que versa a través de las distintas vertientes de la expresión se nos enseña a los hombres y a las mujeres cómo es que debemos ser tratadas, nos encontramos en una tarea de cuestionamiento y deconstrucción en la que podemos permitirnos explorar y tomar decisiones que sean congruentes con nuestros principios. No se trata de dejar de escuchar todos los géneros musicales porque hemos descubierto que de una u otra manera éstos son nocivos para un ideal que buscamos, sino de entender el porqué, explorar las raíces de una situación fuertemente arraigada a nuestra colectividad y como podemos aportar a un cambio positivo para la misma
