En su mayoría las personas que empiezan un negocio, se casan con la idea de que ellos siempre van a sacar la empresa adelante. No obstante, esta es una idea abstracta y equivocada, porque si bien es cierto que eres el dueño de la idea, no eres el dueño de toda la información y de todas las técnicas que se requieren para tener un negocio exitoso.
Nosotros mismos nos creamos esos cuellos de botella al acaparar toda la responsabilidad.
La forma para encontrar soluciones contundentes, está en crearnos buenas preguntas. Ejemplo:
¿Qué necesito hacer para cultivar y multiplicar información de poder en mi cerebro?
Analicemos.
- ¿A que nos referimos a hacer un buen cultivo?
- ¿Cuál es la importancia de multiplicar la información?
- ¿Qué es lo primero que te viene a la mente cuando hablamos de información de poder?
- ¿Qué tanto cuidas los pensamientos que vienen a tu mente?
Nuestra mente almacena la información de manera única, a través de experiencias que vivimos, utilizando nuestros 5 sentidos, el contexto emocional y la perspectiva del entorno. Es así como cultivamos nuestros talentos, incluyendo el liderazgo. Si buscamos estar en un nivel superior, primero tenemos que tener la visión de a dónde queremos llegar; solamente así podemos cultivar experiencias que nos darán ese crecimiento.
El multiplicar es generar información que nos ayude a reconocer nuevas oportunidad de forma acelerada, con un camino hacia: nuevos clientes, nuevas alianzas, mejores contrataciones, mejor dirección empresarial, etc. El problema está cuando postergamos la necesidad de adquirir nueva información de valor en nuestras vidas, pensando que ya lo sabemos todo, es ahí cuando perdemos información de poder. Información que permite abrir nuevas oportunidades en áreas desconocidas, permitiendo que la amplitud del nivel de adquisición económico se incremente y sea un proceso natural. La preocupación por el dinero sería cosa del pasado y tu única ocupación estaría en mejorar y adquirir información de poder para dar soluciones a tus clientes y solo así vas a estar concentrado en lo importante que es darle dirección y visión a tu negocio.
Para que esto sea sostenible habrá que cuidar los pensamientos que vienes adquiriendo conforme al aprendizaje que deja la experiencia; pues tú equipo de trabajo es el reflejo de la información de poder que has cultivado. Así todos trabajarían en mejorar la estrategia de crecimiento, anticipando los problemas sin esperar a que tú como líder tomes la última decisión. Comienza a delegar y a confiar en tu equipo de trabajo. Siempre busca hacerte buenas preguntas y el crecimiento será orgánico.
