Los mexicanos tenemos presente el 02 de octubre de 1968, sin embargo, no fue la única fecha en la que cientos de estudiantes que se manifestaban fueron reprimidos, el 10 de junio de 1971, por los menos ciento veinte estudiantes murieron tras el ataque de un grupo militar.
Este 10 de junio se conmemoraron 49 años de la matanza de jueves de corpus, también conocido como “El Halconazo”. Esta represión tuvo lugar en 1971 y es que los estudiantes se habían reunido en la Calzada México-Tacuba exigiendo al gobierno del entonces presidente Luis Echeverría, libertad política y democratización de la enseñanza.
Eran aproximadamente diez mil estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México y del Instituto Politécnico Nacional, quienes se encontraban en diversos puntos de las calles de la Ciudad de México, ellos habían marchado en solidaridad con el movimiento universitario en Monterrey, aunque también la marcha era parte del reclamo de estos estudiantes, que exigían lo anteriormente señalado, libertad política y democratización de la enseñanza.
Esta marcha, era la primer gran movilización de estudiantes, después de los hechos que habían tenido lugar el 02 de octubre de 1968. Sin embargo, esta segunda protesta que se realizaba de manera pacífica, derivó en lo mismo, en una matanza para estos jóvenes que se manifestaban. Fue aproximadamente en dos horas que, estos estudiantes habían sido atacados, primero con varas y posteriormente con armas de fuego, según las cifras oficiales, murieron alrededor de entre 70 y 120 personas, pero al igual que lo acontecido en 1968, las cifras exactas se desconocen. Fue un hecho histórico, sin duda, e incluso Cuarón lo refleja en la película “ROMA”. Pero lamentablemente, nadie recibió condena alguna por todas estas muertes.
Ahora bien ¿por qué se le denominó a este acontecimiento “EL HALCONAZO”? Se le conoce de este modo, debido a que quienes atacaron a los estudiantes, formaban parte del grupo paramilitar “Los Halcones”, quienes, según investigaciones realizadas por la BBC, era un grupo que integraban jóvenes y militares que habían sido reclutados en barrios marginados y violentos de la Ciudad de México.
Hoy en día, el escenario ha cambiado un poco. En el pasado mes de febrero, miles de estudiantes de diversas instituciones educativas, salieron a manifestarse de forma pacífica a las calles de la Ciudad de Puebla, exigiendo en esta ocasión, mayor seguridad para el sector estudiantil, derivado del asesinato de 3 estudiantes de medicina y de un conductor de UBER.
Marcha que sirvió para darnos cuenta que los estudiantes aún salen a tomar las calles cuando se ven violentados, cuando es necesario levantar la voz para exigir sus derechos. En esta ocasión no hubo grupo que reprimiera a estos miles de estudiantes y muchas personas pudieron darse cuenta que las necesidades que estos jóvenes tienen, son las mismas que muchos ciudadanos ya exigían. Los estudiantes de hoy, nos dieron una gran lección, que el pueblo tiene memoria, que esa memoria tiene peso y que aquellos que fueron obligados a callar en 1968 y en 1971, no han sido, ni serán olvidados en mucho tiempo.
